Ser uno mismo es la única manera de ser feliz en la vida. Primero porque te aceptas tal y como eres. No podemos dar felicidad a otros a menos que la llevemos dentro. Escapar de nosotros mismos nos pasará factura a la larga. Tarde o temprano nos toparemos con nosotros mismos y con nuestra propia realidad. El secreto de la felicidad está en disfrutar de quien realmente somos y de encontrarle la "chispa de la vida" a quienes somos y a lo que llevamos dentro.
Tenemos un tendencia a ser pesimistas, a ver el lado negativo de las cosas, a fijarnos más en lo que falta que en lo que ya tenemos. La VIDA es algo grande y en los peores momentos salen a relucir las grandes oportunidades y todas las cualidades que se esconden en nuestro interior. Una mirada positiva y optimista, además de hacernos sonreír, amplía nuestras mentes, nuestros horizontes y nuestras cualidades.
Preocupados por el pasado, cargamos con él, o más bien lo arrastramos haciendo que nosotros mismos nos arrastremos por la vida. Pensar constantemente en el futuro, o depender de él, nos crea ansiedad y hace que nos olvidemos de algo tan real y tan bello como es el PRESENTE que tenemos que vivir y saborear cada día. El pasado ya no existe y los miedos del futuro en muy pocas ocasiones llegan a hacerse realidad. Vivir el presente, nuestra mejor apuesta, y sobre todo aprender de él.
Me encantan los niños y los jóvenes porque sueñan. No pierden esa capacidad de desear prosperar y de crear un mundo mejor y más justo. Soñar no cuesta. Lo mejor de todo es que nuestros sueños se pueden convertir en una realidad cuando nos los tomamos en serio y cuando somos capaces de dar uno, dos, tres y otros tantos más pasos, además de saber sortear las dificultades. ¡Viva los sueños!
Actuar, dar el paso, hacer algo, ser activo y proactivo es importante. Yo me he dado cuenta que en la vida estar activo es "felicidad". Te sientes parte de la vida, sujeto de lo que haces y que llevas una dirección, o sea, que no eres una parte pasiva de ella. Ello conlleva algo importante, felicidad. Si bien dicen que hacer deporte y ejercicio físico te mantiene vital, hacer de tu vida un constante caminar hacia algo que quieres te hace sentir vivo.
¿Rendirse? ¡Jamás! No vale tirar la toalla porque ante el desánimo están los retos, la esperanza, la propia cosecha de cada uno que invita a seguir soñando y buscando nuevos caminos en la vida que te permitan seguir sintiéndote vivo. La dificultad y los obstáculos son retos y rompecabezas que tenemos que saber encajar cuando las piezas parecen no encajar. ¿Jugamos? ¿Por qué no? La vida es como un juego y como juegos más divertida y dinámica la podemos hacer.
Sonreír. ¿Qué aporta una sonrisa en la vida? ¿Y en medio de un problema? Un espíritu abierto y un gran sentido de la flexibilidad y de libertad. La sonrisa nos permite ver el lado positivo y las perspectivas de formas mucho más optimistas y no derrumbarnos ante las circunstancias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario