7/6/10

Actitud positiva: Predisponiendo la mente


Escuchaba al psicologo John Bargh de la Universidad de Yale hablar de la predisposición que tenemos las personas, a nivel inconsciente, de hacer las cosas mejor o peor. Uno de los estudios que se hicieron, por ejemplo, era la de hablar con un grupo de personas sobre una persona apreciada y querida, como puede ser la propia madre. Hablaban de forma insconsciente e informal: que cosas le gustaban a su madre, a que supermercado iba, que tipo de comida hacía y que le salía bien...., etc. Acto seguido se les pedía una tarea y se comprobaba que la actitud que se tenía en la tarea era mucho mejor que si previamente se le hablaba de amigos o de conocidos. Decía él que cuando pensamos en personas la mente comienza, inconscientemente, a marcar objetivos y si las personas representan algo muy positivo mejor predisposición tendremos.

Si la disposición de la mente es positiva se abren más cauces, más posibilidades y sobre todo una actitud más positiva y mejor para emprender tareas y objetivos que nos lleven a realizar nuestros cometidos con mucho mayor éxito. ¿Será cuestión de que en una entrevista de trabajo, antes de un partido de futbol, ante una situación limite que podamos estar viviendo repasemos de forma inconsciente los momentos agradables de nuestra vida, bien sean los de nuestras madres, hijos o personas realmente importantes para nosotros?

Un detalle curioso es la expresión "romper el hielo" que se utiliza mucho en dinámicas de grupos y que no hacen otra cosas que hacer reír a la gente, deshinbirse y cambiar los cuerpos de posición, ponerlos en movimiento y entremezclarse entre todos los participantes. ¿Resultado final? La gente, dependiendo de la dinámica utilizada, tiene un mayor nivel de participación.

Se dice que uno de los equipos de fútbol que han hecho historia en las últimas temporadas aquí en España utiliza los videos motivacionales antes del partido e incluso en los descansos. La mente tiene mucho poder y si uno la predispone mucho más. ¿Cuánto tiempo le dedicamos a nuestro trabajo mental?