28/1/10

Viviendo cada momento




Saborear La vida
Es poner atención

Y tomarnos tiempo

Para apreciar

cada aspecto placentero

de las cosas.

 

Margarita Tarragona


Estamos en la época de la velocidad. Todo vuela, todo fluye y cambia a velocidades supersónicas. Vivimos con la impresión de que el tiempo se nos escapa de las manos. Muchas veces no nos sentamos ni para comer; cuando lo hacemos tendemos a hacerlo rápido. La velocidad de las cosas parecen poder con nosotros. Pero, ¿cuál es el coste?

Además del stress en el que vivimos, tal vez haya cosas más importantes que podamos perder. Saborear el paso a paso y todo aquello que nos vamos encontrando en la vida.

Imáginate por un momento sentado en un parque:

¿Te has parado a saborear la energía de los niños que juegan?
¿Te has puesto a escuchar y llenarte de sus risas, de sus gritos, de sus peleas?
¿Has observado, sentido la tranquilidad de la vegetación, de los pájaros, de los colores que te rodean?
¿Has puesto tu mirada en los rostros, marcados por la edad, de los ancianos? ¿Y los de los niños? ¿Y los de la gente adulta?
¿Te has quedado ciego, sordo y mudo en medio del parque? ¿Qué has sentido?

Imaginate ahora, no en el parque, sino en tu casa, en tu puesto de trabajo, en tu coche. ¿Tienes tiempo para gozar de cada instante?

La vida corre, pero nosotros podemos imponernos el ritmo para que cada instante lo podamos aprovechar, aunque sea por cinco, quince minutos o una o dos horas. Todo depende de nosotros, del tiempo que queramos darle a pararnos a saborear, observar, escuchar, sentir y vivir cada momento.

¿Qué es lo que más te gusta gozar de la vida?

¿Cuáles han sido tus tres mejores experiencias de gozo?

¿Qué puedo hacer para cultivar el gozo actualmente en mi vida?

¿Una canción de Maná? En el muelle de San Blas