Las creencias y las conductas de las personas
son tan importantes como lo tangible.
Scott Keller
Parece mentira, pero es toda una realidad. Podemos cambiar las estructuras económicas, políticas y sociales que si no cambiamos nuestras creencias lo único que haremos es llevar el mismo problemas a otro sitio, en otras circunstancias y con otras personas.
Los cambios más importantes no son los que se producen a novel estructural sino a nivel personas, pues al fin y al cabo somos lo que pensamos ya que son nuestros pensamientos los que dirigen nuestras vidas. El pensamiento fortalece fuertemente nuestras creencias y nosotros nos movemos a través de ellas. Nuestras conductas dependen directamente de lo que nos creemos por muy certeros o equivocados que estemos.
- ¿Hasta que punto nuestras creencias nos ayudan a vivir?
- ¿Somos capaces de cuestionarlas?
- ¿Están al servicio nuestro o nosotros al servicio de nuestras creencias?
- ¿Forman parte del sentido de nuestra vida?
- ¿Nos hacen crecer y madurar como personas?
Queramos o no nacemos y desde pequeños vamos adquiriendo creencias y conductas que muchas veces no tan siquiera cuestionamos. ¿Qué sería interesante o importante en nuestras vidas con referencia a nuestras creencias? Ser conscientes de ellas, pues muchas veces somos tan autómatas que ni somos conscientes de ellas. Y lo segundo ir adaptándolas y desarrollándolas poniéndolas a nuestro servicio que de sentido a nuestra vida.
¿Cuáles serían las principales creencias irracionales que nos impiden ser felices o nos bloquean en la vida? Según Alber Ellis hay diez:
- Es una necesidad extrema, para el ser humano adulto, el ser amado y aprobado por cada persona significativa de su entorno
- Para considerarme a mí mismo/a como una persona válida debo ser muy competente, suficiente y capaz de lograr cualquier cosa que me proponga
- Las personas que no actúan como deberían son malvadas, y deberían ser castigadas por su maldad
- Es terrible que las cosas no funcionen como a uno/a le gustaría
- La desgracia y el malestar humano están provocados por las circunstancias externas, y la gente no tiene capacidad para controlar sus emociones
- Si algo es (o puede ser) peligroso, debo sentirme terriblemente inquieto/a por ello y debo pensar constantemente en la posibilidad de que ocurra, para estar preparado/a
- Es más fácil evitar responsabilidades y dificultades de la vida que hacerles frente. Así viviré más tranquilo/a
- Debo depender de los demás y necesito a alguien más fuerte que yo en quien confiar
- Lo que me ocurrió en el pasado seguirá afectándome siempre
- Debemos sentirnos muy preocupados por los problemas y perturbaciones de los demás
- Existe una solución perfecta para cada problema, y debemos hallarla siempre.
Estas creencias que muchas veces nos dirigen en la vida también nos hacen frenar ante ella y nos impiden tomar iniciativas que nos permitan desarrollarnos más y mejor.
