22/7/15

Carácter y toma de decisiones.


Más que una forma de ser, el carácter es una fuerza que regula nuestra forma de actuar. Es por ello que nuestro carácter forja nuestro destino. Nuestro destino no es sino otro que el resultado de todas y cada una de las decisiones que tomamos cada día y de acuerdo con nuestros valores y metas que deseamos conseguir. El carácter, pues es la fuerza de mantener el rumbo en todos los momentos de la vida y en medio de las decisiones que tomamos.

¿Cómo tomar buenas decisiones?
  • Información: Recoger todos los pros y todos los contras que envuelven la decisión a tomar.
  • Conocimientos de las circunstancias que envuelven la toma de decisiones, que puede ser de lo que uno conozca o de lo que otros puedan ayudarnos a conocer.
  • Experiencia personal y experiencia contrastada. La experiencia personal nos ayuda más pues se basa en decisiones ya tomadas y tenemos los resultados que nos pueden ayudar. La experiencia de otros también nos puede ayudar, aunque siempre han sido en unas circunstancias posiblemente diferentes a las nuestras. Ahí solo toca arriesgar.
  • Análisis de la situación y desde perspectivas totalmente diferentes. Si se tiene un método de análisis que pueda ayudar, mejor que mejor. Y si no se tiene intentar hacerlo lo más profundo posible.
  • Juicio: El juicio es necesario para combinar la información, los conocimientos, la experiencia y el análisis, con el fin de seleccionar el curso de acción apropiado. No existen substitutos para el buen juicio