11/2/16

El poder de las decisiones.


El poder de la decisión.


¿Alguna vea te has parado a pensar el poder que tiene una decisión? Para bien o para mal las decisiones que tomamos cada día determinan todo aquello que vamos a conseguir. Cada día, sin que nos demos cuenta, tomamos un montón de decisiones de forma automática o de forma consciente. Unas veces bien meditadas y otras un tanto a lo loco dejándonos llevar por la intuición o por el momento como pueden ser en muchos casos las "compras" compulsivas. Lo que si está claro es, que en medio de todo ello la decisión tiene un poder decisivo para bien o para mal. ¿Cómo tomar buenas decisiones?

Pasos a tener en cuenta en una toma de decisiones.


  • Centrarse en lo realmente "importante".
  • Hacer las cosas de una manera "lógica y coherente", es decir que tenga sentido.
  • Tener en cuenta todos sus componente "subjetivos y objetivos" ya que ambos estarán influyendo de una manera u otra en la decisión.
  • Conjugar el "pensamiento analítico y la intuición".
  • Recoger la "información necesaria" para poder optar entre varias cosas.
  • Tener en cuenta las "opiniones" al respecto ya que nos ayudará a tener una visión más amplia de las cosas.

Aspecto determinantes en la toma de decisiones.



  • Identificar el problema. Hacerlo de una manera clara, porque no siempre el problema que tenemos es el real. El que se manifiesta puede ser la punta del Iceberg de otro problema que subyace dentro de nosotros mismos. No es lo mismo comprar una casa de un precio que de otro, en un barrio que en otro. Unas veces el problema puede ser económico, pero otras y de forma escondida puede ser el estatus social, el orgullo, las apariencias, etc.
  • Analizar el problema. Es por ello que es importante no solamente identificar el problema sino el analizarlo a fondo para poder comprenderlo y darle la solución que se merece. Ello requiere una buena dosis de sinceridad con uno mismo y la capacidad de sentarse a pensar y a analizar, a veces sólo y otras veces en compañía de otros.
  • Opciones y alternativas a tener en cuenta en la decisión. Siempre hay más de una alternativa. De hecho si tenemos que decidir lo tenemos que hacer entre una cosa y otra. Pero siempre hay otras posibilidades en las que tenemos que ceder, adaptarnos, ser flexibles o coger alternativas previas a las que pueden ser mejores pero no viables en su momento.
  • Elegir la mejor opción. Puede ser fácil o no, pero cuando se tiene la información necesaria ayuda más a tomarla y de una forma mucho mejor.
  • Costes y beneficios de la mejor opción en todos los niveles de la vida. En la vida todo tiene un coste. Tenemos que pagarlo por conseguirlo. ¿Merece la pena el coste que hay que pagar? ¿Ayuda a conseguir el objetivo principal? ¿Afecta a personas de mi entorno de forma positiva o negativa? 
  • Llevar a la práctica lo decidido. Nada cambia en la vida si nada se hace. La acción es fundamental. Cuestión de decidirse y a veces hacer como cuando uno va a entrar a bañarse en el agua: a la de una, dos y tres. Vuelvo a repetir, con la información es mucho más fácil.
  • Evaluar los resultados que se van teniendo. Y esto cuando se ha tomado la decisión. Ayudan a mejorar el camino.