23/7/14

Entre lo que puede ir bien y lo que puede ir mal.


El eterno dilema es el miedo que nos invade y el sentido pesimista que tenemos de las cosas. La famosa Ley de la Atracción nos dice que ocurre lo que pensamos, es decir que atraemos a nuestra vida aquello que atraemos con nuestros pensamientos pues al fin y al cabo son los pensamientos que tenemos los que dan forma a nuestra vida y a nuestros proyectos.

El miedo y lo que puede ir mal nos frena y nos impide ir hacia lo que queremos conseguir en la vida, aunque si somos sinceros si lo que quisiéramos realmente fuera algo que deseáramos obtener tendría mucha más fuerza en nuestra mente y en nuestra vida que aquello a lo que tememos.

Una de las cosas que ha estado presente en la vida de todos aquellos que han logrado sus metas es que pensaban, precisamente, en lo que sí querían conseguir y no en los miedos que les rodeaban. La fuerza del suelo está por encima de la fuerza del miedo.

¿Qué pasaría si en medio de nuestros miedos comenzáramos a pensar en lo que sí puede ir bien y en lo que puede repercutir en nuestras vidas? ¿Cómo podemos visualizar aquello que si deseamos en la vida? ¿Cómo lograr que ocupe más espacio en nuestra mente aquello que queremos que aquello que tememos?

En nosotros está la fuerza y la decisión de elegir los pensamientos que queremos tener en nuestras vidas y como pueden ayudarnos a conseguir lo que sí queremos.