Muy bonito el artículo de Ramóm Samsó en el País Semanal sobre esa extraña y curiosa necesidad que tenemos de cambiar a los demás. En el fondo nuestra felicidad parece que reside en que la vida sea como nosotros queramos o que la gente vida y piense como lo hacemos nosotros. ¿Qué nos sucede cuando vivimos o trabajamos con alguien que no piensa, vive o trabaja a nuestro estilo?
Hace tiempo leí a alguien que decía que el mayor milagro que podría ocurrir sería hacer la voluntad de Dios, puesto que siempre le pedimos a él que haga todo lo posible para la nuestra ocurra. Esa es la realidad.
Protestamos, peleamos, discutimos, nos enfadamos, entramos en guerras absurdas y, por lo general, porque deseamos cambiar el mundo y hacerlo tal y como nosotros queremos. "Rumi", en la frase que encabeza esta reflexión, nos muestra que la sabiduría no está en cambiar al mundo sino en dejarse enriquecer por la misma vida y por los demás, riqueza que rechazamos cada vez que lo diferente se enfrenta con las posturas rígidas que tenemos en la mente, en nuestras creencias o en nuestras costumbres.
La evolución dice que la riqueza de las especies está en "aprender", en "adaptarse" a las circunstancias. Es la manera en cómo aprendemos, en cómo nos desarrollamos, en cómo crecemos. El cambio, pero no el cambio que tienen que hacer los demás, cada uno sabrá en lo que tiene o quiere cambiar, sino en el cambio personal que cada uno tiene que realizar.
La experiencia nos dice que no cambiamos a la fuerza, sino fruto de la experiencia y de los golpes que nos da la vida. Cambiamos cuando nos convencemos que el cambio nos favorece individualmente como personas y que ese cambio nos aportará felicidad y alegría.
¿Qué perseguimos, en el fondo, cuando queremos cambiar a los demás? No es sino esa pobreza que a nosotros mismos no nos convence y tenemos que apoyarnos en la fuerza que desarrollamos hacia los demás.
Nunca estaría demás el saber por qué queremos que los demás cambien. ¿Qué dice ese cambio que esperamos de demás de nosotros mismos? ¿Qué áreas oscuras o inmadurez reflejan en nuestras vidas? Te recomiendo que leas el artículo. Me parece interesante.