4/4/14

El valor del esfuerzo


Un día un hombre encontró un capullo de mariposa y observó que en el había un pequeño orificio. Se sentó y se entretuvo en observar mientras la mariposa luchaba durante varias horas para forzar su cuerpo tratando de pasar a través de agujero. Pasó un largo rato observando los esfuerzos de la mariposa por salir al exterior, pero parecía que no hacía ningún progreso, como si hubiera llegado a un punto donde no podía continuar. Apiadado, el hombre decidió ayudar a la mariposa, tomó las tijeras y cortó el resto del capullo. La mariposa salió fácilmente, pero tenía el cuerpo hinchado y las alas pequeñas y arrugadas. El hombre continuó mirando porque esperada que en cualquier momento las alas se extenderían para poder soportar el cuerpo que, a su vez, debería deshincharse. Pero nada de esto ocurrió. Por el contrario, la mariposa pasó el resto de su vida con el cuerpo hinchado y una alas encogidas... ¡nunca pudo volar! Lo que aquel hombre, con su amabilidad y apuro, no llegó a comprender es que el capullo restrictivo y la lucha necesaria para que la mariposa pudiera salir por el diminuto agujero, era la manera que utilizaba la Naturaleza para enviar fluido del cuerpo de la mariposa hacia sus alas de modo que estuviera lista para volar tan pronto obtuviera la libertad del capullo. A veces el esfuerzo es exactamente lo que necesitamos en nuestras vidas. Si DIOS nos permitiera pasar nuestra vida sin ningún obstáculo, nos paralizaríamos, no seríamos ta fuertes como podríamos ser y no podríamos volar!
Este cuento me encanta. Son muchas las veces en las que intentamos echar una mano y estropeamos todo. Tenemos buenas intenciones, pero muchas veces no logramos ayudar a que las personas salgan pos si mismas. Ya lo decía, creo que Helder Cámara, cuando proponía de no darle a los pobres de comer sino de darles una caña para pescar.

Es la virtud del esfuerzo y la del sacrificio la que hace que valoremos lo que perseguimos y la que vayamos en pos de algo si es que ese algo nos interesa. ¿Cómo sabemos si algo le interesa a una persona? Por el interés y el esfuerzo que pone en lo que desarrolla.

Un claro ejemplo de ello lo tenemos cuando oímos ciertas expresiones como las de que "no quiero que mis hijos pasen por donde yo he pasado". Cierto que muchas veces en la vida hay situaciones que no se las deseamos a nadie, pero también es cierto que cada uno tiene que conseguir las cosas por sí mismo; es donde reside el valor.

Es una de las cosas que aprendemos en la vida cuando se nos deja solos, que podemos por nosotros mismos. Es una manera de crecer en autoestíma, en seguridad personal, en recursos propios y sobre todo en capacidad de poner nuestra cabeza a pensar en busca de convertir las dificultades en retos y oportunidades.

Eh aquí una oración que encontré en una ocasión que puede valernos en medio de la dificultad:

YO PEDÍ FUERZA...
Y ENCONTRÉ  DIFICULTADES PARA HACERME FUERTE.

YO PEDÍ SABIDURÍA...
Y TUVE PROBLEMAS PARA SOLUCIONAR.

YO PEDÍ PROSPERIDAD...
PERO SOLO TUVE CEREBRO Y FUERZA PARA TRABAJAR.

YO PEDÍ CORAJE...
Y ENCONTRÉ  PELIGRO PARA VENCER.

YO PEDÍ AMOR...
Y VI GENTE QUEBRANTADA A QUIEN AYUDAR.

YO PEDÍ FAVORES...
Y ENCONTRÉ OPORTUNIDADES.

NO RECIBÍ NADA DE LO QUE QUERÍA...
¡RECIBÍ TODO LO QUE NECESITABA!