7/6/11

¿Arriesgar?




"Solo aquellos que se atreven a perder mucho, pueden logar mucho", decía Robert Kennedy. La verdad es que somos personas que nos gusta mucho asegurar las cosas; los puestos de trabajo, seguros de vida, situaciones sociales, amistades. No importa si el crecimiento persona se queda medio tullido o no. Nos dejamos llevar por el ándese caleinte, ríase la gente, por el más vale pájaro en mano que ciento volando o el más vale prevenir que lamentar. Vivimos en la época de los seguros de la casa, del coche, de los planes de pensiones, etc.

Hace unos días participaba en una conversación entre motoristas, uno de los cuales se fue durante unas semanas a explorar la zona del Himalaya en una moto que había alquilado por aquellas tierras junto con un grupo de amigos. Iban con lo justo y necesario y no con la mejor maquinaria del mundo. De repente se encontraron con una expedición rusa en la que los motoristas iban acompañados por cohes de refuerzos, guías, médicos, mecánicos de todo tipo y un sin fin de apoyos.

Buscamos la seguridad en contra del riesgo. Y estoy seguro que en nuestras vidas hay momentos de riesgo que tememos asumir y afrontar. ¿Ganamos? ¿Perdemos? ¿Merece la pena arriesgar? ¿Merece la pena perder? Muchas veces jamás lo sabremos hasta que afrontamos el riesgo y vemos las consecuencias positivas o negativas que podemos encontrarnos. Siempre es mejor hablar a toro pasado, pero la vida está llena de insensatos que no sólo han ganado o perdido para ellos, sino que nos dejan un legado que en estos momentos podemos compartir y vivir en nuestro día a día.