27/6/14

Equilibrio


Habíamos acabado una reunión donde alguien discordaba del resto del grupo sobre unos aspectos. Cuando salíamos compartía conmigo que se sentía incomoda cuando había enfrentamientos en los grupos de trabajo. Desde joven había decidido emprender negocios por si misma y sola, simplemente para evitar este tipo de situaciones.

Me comentaba también que en en situaciones así, que no fue el caso de la nuestra, simplemente se levantaba en silencio y se iba, sin ningún tipo ni de remordimiento, ni de resentimiento. Buscaba simplemente que el equilibrio fuera una realidad en ella y que nada exterior se lo quitara.

Es difícil el mantener el equilibrio. Pensamos que nuestras actitudes pueden ser objeto de critica, de rechazo o incluso de no aceptación. Pero no hay nada mejor que ser uno mismo y sentirse bien consigo mismo. Es señal de libertad y al mismo tiempo de apertura a lo que pueda suceder en la vida, siempre y cuando el problema no nos acompañe en la mente.

Equilibrio es Paz.


26/6/14

Entre el hábito, la rutina y la perseverancia.



La suerte o el éxito no vienen por casualidad sino que son fruto de todos y cada uno de los pasos que hemos ido dando en la vida. Cada paso que doy me lleva hacia algún sitio. Los sitios no vienen a uno sino que uno se dirige hacia ellos.

Hay objetivos que son difíciles de alcanzar a primera vista, pero si comenzamos a dividirlos en pequeñas etapas poco a poco vemos que son más alcanzables de lo que esperábamos. Es bueno fijarnos metas a largo plazo y tal vez altas, son parte de nuestros sueños; sueños que son parte de nuestras ilusiones y de lo que conforma nuestra forma de ser.

Pero fijarnos en las altas metas y tenerlas metidas de forma constante en la mente puede ser un arma de doble filo porque al ser largo el camino puede llegar a desanimarnos. Si por el contrario dividimos ese objetivo en varios sabemos que primero alcanzamos uno, luego otro y así, poco a poco, nos vamos llenando de fuerza y de optimismo viendo que damos pasos, que conseguimos pequeños adelantos y que vamos cubriendo nuestras expectativas.

Es el hábito, la perseverancia, la constancia, el hacer cada día lo mismo y un poco más lo que hace que el talento se desarrolle hasta el punto de convertirlo en excelencia. 

¿Qué es más fácil bajar 30 kilos o bajar 1 cada semana? 1 es asumible, 30 también, aunque se nos hace cuesta arriba. Es la perspectiva la que ayuda o la que desanima, pero son los hábitos los que nos mantienen en el camino. Y a la hora de escoger escojamos las perspectivas que nos ayuda, acompañadas por los hábitos que hacen realidad cada paso que damos.


25/6/14

Acusación vs Justificación.


Me encanta esta frase de Francisco. Son muchas las veces que nuestro éxito se ve parado por las acusaciones que vertimos hacia los demás; acusaciones que muchas veces esconden los propios fallos de cada uno de nosotros. Lo peor de todo es cuando somos capaces de ver los fallos de los demás y somos incapaces de ver los propios o simplemente los justificamos por no reconocerlos.

¿Qué pretendemos a la hora de señalar con el dedo? ¿Qué buscamos a la hora de juzgar? Sería interesante el pensar y reflexionar en cuanto a esas ocultas intenciones que muchas veces tenemos, más que nada por conocernos un poco más a nosotros mismos y también, conocer otras situaciones que vemos desde fuera, y por verlas desde fuera no somos quienes para juzgar.

¿Es un "instinto" que fluye de forma tan natural dentro de nosotros? ¿Es realmente ese instinto algo que llega a causar desastre dentro de nosotros o a nuestro alrededor?



24/6/14

Controlando las emociones.



El control de las emociones, tanto positivas como negativas, es básico para poder alcanzar en muchas ocasiones los objetivos que nos proponemos. El día de ayer nos muestra, precisamente, como se puede pasar de una a otra por culpa del control de la primera.

Un partido de fútbol en el que se decidía el ascenso a la primera división de un equipo que llevaba varios años en la segunda. Durante casi todo el partido iban ganando 1-0. El otro equipo no parecía tener muchas posibilidades de marcar. De repente llega ya el último minuto del partido y el árbitro decide prorrogar otros tres minutos más. Un ciento de aficionados, de los 35.000 que asistían al partido, movidos por la euforia del ascenso comenzaron a bajar al cesped. El arbitro tuvo que suspender momentáneamente el partido hasta que los aficionados se retiraran. 

Se reanudo el partido, y el la única jugada que faltaba el equipo que iba ganando se descentró y ahí llegó el gol que durante todo el partido no parecía llegar y el equipo tuvo que resignarse a tener que quedar otro año más en la segunda división. Curiosamente los que festejaban antes de tiempo la victoria desconcentraron a su equipo con la mala fortuna de hacer posible que las ilusiones se vinieran abajo en cuestión de segundos. Curioso, ¿no? Pero real.

Si no somos dueños de las emociones corremos el riesgo de ser esclavos de ellas y de perder el control de lo que hacemos en la vida. Las emociones y los sentimientos nos caracterizan como seres humanos, la falta de control puede llegar a deshumanizarnos y a perder los objetivos que tenemos.


23/6/14

Estar informado.


Hoy alguien pedía ayuda sobre algo que se le estaba preguntando acerca de un negocio. Al ser principiante no tenía clara la respuesta que dar y la solicitó a los compañeros. Alguien le comentó que lo mejor en ese caso y a ese tipo de preguntas mejor ni molestarse, ni contestar ni intentar convencer a nadie. 

Lo curioso de ello es que muchas preguntas tienen muchas respuestas. Yo personalmente di la mía así como la dieron otros compañeros. ¿Donde estriba la dificultad muchas veces? Que no tenemos la información suficiente, que no somos capaces de cuestionarnos y que ni tan siquiera nos molestamos en ofrecer respuestas validas, bien sea a nivel de negocios, bien lo sea a nivel de relaciones personales o de creencias y costumbres.

Hemos dejado a un lado la era de la tecnología y hemos entrado en la era de la información. La información es poder, pero quien no vaya detrás de ella podrá verse abocado a vivir en una vida cargada de muchas oscuridades, propia y ajenas, incapaces de entender y de ayudar a otros a comprenderlas.

No podemos conformarnos con saber lo que sabemos. Hay que intentar saber más de lo que sabemos ya que nuestro sitio en la vida depende del conocimiento que tengamos de todo aquello que nos rodea. Desconocer nos puede llevar a vivir una vida en la que andemos como perdidos.

Hay algo que nos desespera en una etapa de crecimiento de nuestros hijos; la etapa de los porqués. Preguntas que comprometen, preguntas que no sabemos contestar, preguntas que incluso a veces ni nosotros mismos nos hemos preguntado. Tanto para los niños como para los adultos saber, querer saber y llegar a saber es parte del saber vivir y del saber estar en la vida.


19/6/14

Dejen salir, antes de entrar.


Hay un dicho, una costumbre y una norma de seguridad que dice: "Antes de entrar, dejen salir". Y la verdad es que la capacidad que puede albergar un sitio es limitada. Lo mismo nos pasa con la mente humana, estamos llenos de ideas, conceptos, costumbres, pensamientos, creencias y experiencias que nos mantienen atados al pasado y a momentos que ya no son parte de nuestra realidad. Lo peor de todo es que nos encadenamos a todas esas situaciones y esa dependencia y falta de libertad nos impiden dar pasos mucho más certeros en la vida que nos ayuden a vivirla y no simplemente a sobrevivirla.

¿Te has fijado en lo que nos cuesta desaprender? ¿En dejar a un lado opiniones y puntos de vista? ¿A dejar de pensar de la forma en la que lo hacemos? 

No es cuestión de abandonar esquemas que tenemos por abandonarlos, no. Es cuestión de que esos esquemas no nos permitan ver más allá de lo que realmente hay. Es como si algo o alguien se nos atragantara en la vida y no fuéramos capaces de ver otros aspectos más allá de los que nos producen estorbo, dolor o negatividad. 

Creemos siempre que lo que debe cambiar es la realidad, o las personas que forman parte de ella. Eso me hace pensar en aquella frase de Jesús que dice que lo que hace impuro al hombre no es lo que come, sino lo que está dentro del mismo hombre. Es decir, no son las cosas en sí las que son malas, sino la forma de ver las cosas que tiene uno lo que hace que sean malas.

Es por ello que nunca está de más hacer limpieza en los cajones mentales que tenemos. Sobran muchas cosas, conceptos, creencias y maneras de pensar que no nos hacen libres ni nos permiten vivir en esa libertad que si depende de nosotros. Abrirnos a la vida es dejar un hueco dentro de nosotros para que entre la luz y aporte algo nuevo pero, ¿y si está nuestra mente saturada? Hay que hacer espacio. Y mientras nos aferremos a nuestros viejos dogmas poco espacio dejamos para que entre la vida o la posibilidad de generar vida desde nosotros mismos.

Creo que toca hacer limpieza.


18/6/14

Reuniones de equipo


Me gustan reuniones de equipo como la de hoy, reuniones en las que se mira hacia un objetivo determinado y desde el que todo el mundo aporta desde sus ideas hasta sus inquietudes. He salido plenamente satisfecho por la ilusión que veo y por el gran aporte que hemos dado todo. 

Ahora mismo acabo de pedir la colaboración a una compañera en la otra punta de España y se ha prestado a colaborar sin rechistar. ¿No es grande el sentirse parte de un equipo y sentir que ese equipo forma y colabora en tu propio proyecto? Colaboración recíproca. Es lo grande de trabajar así.

El trabajo en equipo es por ello:
  • Mirar en la misma dirección, remar juntos y tener claro hacia donde se va. Y si no se tiene claro tener la confianza suficiente de preguntar o incluso de cuestionar aquello que no se entiende o no se llega a compartir del todo. Tener objetivos comunes es básico.
  • Sentirse con capacidad de aportar. Y digo esto porque lo notas cuando los que aportan lo hacen con seguridad y convencimiento, con alegría y con confianza. No hay nada como sentirse uno a si mismo en medio del grupo y que el grupo valores aquello que dice el otro,
  • Responsabilidad y ser parte del grupo. Me preocupan las reuniones calladas en el que todo el mundo asiente o espera que otros dirijan la batuta. Me encanta el dinamismo de hablar, de exponer libremente lo que se siente o lo que se piensa. Es ahí donde nos sentimos parte de algo o de alguien y es ahí donde no caminamos a remolque de otros. Es esa actitud que muchas veces vemos en el ciclismo donde unos corredores se van relevando unos a otros para ir tomando más velocidad e ir imprimiendo carácter a la carrera.
Lo mejor de todo ello es ver como todo fluye y la impresión de que caminas más seguro e incluso más rápido. La verdad es que estoy contento de este gran dia o mañana de reunión. Hasta la ideas y la creatividad fluyen.




17/6/14

Creciendo uno mismo



Hace a penas una semana escuchaba a una persona quejarse amargamente de las ayudas que reciben ciertas personas que vienen del extranjero y la falta de ayuda que recibe ella después de haber trabajado toda su vida y encontrarse en una situación precaria. Comprendí su queja y le envié un mensaje brindándole mi apoyo y mi ayuda. Ciertamente podía gustarle o no lo que yo podía hacer por ella. Lo peor de todo es que no se interesó ni tan siquiera en la propuesta. 

A veces creo que hacemos de la queja nuestra bandera, nos instalamos en ella y queremos que nos den las soluciones servidas en bandejas de plata. Creemos que nos merecemos todo en la vida, pero nos olvidamos que la mejor ayuda es la que podemos conseguir por nosotros mismos y la que nos hace sentir que "somos alguien" en la vida.

Lo que nos dan muchas veces es algo que nos deja en el mismo sitio, dependientes de los demás. Es algo que no nos ayuda a valernos por nosotros mismos. Y la verdadera ayuda es aquella que cree en el potencial de la persona aún a pesar de sus propias limitaciones. Dicen que a quien le falta un sentido, por ejemplo la vista, desarrolla más otros, como puede ser el olfato, el tacto o el oído.

Pasamos de ser inútiles a desarrollar otras capacidades que tenemos. Lo importante es que aquello que deseamos no podemos esperar a que nos caiga del cielo, sino que tenemos que salir a buscarlo, tenemos que crear las circunstancias por nosotros mimos para que suceda, para que sea una realidad. Hay que parecerse al agua que no se frena antes los obstáculos y rodea piedras, barrancos y otros escollos para seguir su cauce.

La limosna, los derechos, las ayudas que pedimos ¿son aquellas que nos ayudan a valernos por nosotros mismos o a seguir dependiendo de los demás? No hay nada como sentirse vivo y que aportas a la vida aquello que hay dentro de ti a pesar de las circunstancias, porque en esas mismas circunstancias hay salida, y la salida la tiene que buscar cada una, con o sin ayuda, pero es cada uno el que tiene que buscar su propio éxito y superación en la vida. Nadie puede vivir por nadie. A cada uno le toca vivir y escribir su propio episodio en la vida. ¿Qué sentido tiene el mío? Dependiendo del sentido, dependerá la actitud ante la misma vida y ante las propias circunstancias.


16/6/14

Saber elegir, lo que es digno de escuchar.



Leyendo su libro, "Su 1er Año en Network Marketing", Mark Yamell deja ver algo importante a la hora de saber vivir y de saber elegir en la vida: El saber buscar la información adecuada.

¿A quién escuchamos? ¿Por qué escogemos estas fuentes? ¿El éxito de estas fuentes está corroborado? Hoy curiosamente leía una noticia en Facebook sobre la muerte de la cantante Shakira en un accidente de coche en Colombia. La verdad es que me sorprendió y lo primero que hice fue corroborar la noticia en un medio de prensa nacional como El País; no había señales de vida ello. Intrigado me fui al diario Sport pues ella está casada con un jugador del Barcelona; sin noticias de ello. En la pagina oficial de Shakira tampoco había información al respecto. Ya por último me fui al diario Marca, pues afectaría a la Selección Española de Fútbol que está jugando en el Mundial de Brasil ya que su marido, Piqué, se encuentra allí jugando con España y tampoco había noticia sobre ello. 

Había tenido la oportunidad de ver un video sobre el accidente y como me pedía un "Me gusta" antes de verlo pues no lo hice ya que no voy a decir que algo me gusta sin verlo previamente. Pero justo en ese momento comienza a descargarse un archivo que yo no había autorizado. Tuve la suerte de detenerlo ya que poco después me avisaban de que era un potente virus.

Y en la vida real nos pasa lo mismo. Escuchamos muchas veces a quien no sabe de lo que habla y dejamos de escuchar al que sí sabe de lo que hable. ¿Resultado? Que tomamos decisiones erróneas por haber escogido las fuentes erróneas. Nuestra capacidad de cuestionar la información que tenemos nos puede llevar a obtener algo que realmente no queremos.

El filtro para el éxito en la vida, en el trabajo, en la familia, en las relaciones es saber "seguir" el camino de los que hablan partiendo del éxito obtenido, es decir, siguiendo los parámetros de aquellos que sí saben de lo que hablan, de lo que han palpado y de lo que han sentido. Es por ello que no solo seguimos palabras, sino que seguimos ejemplos de los que si viven aquello que dicen y que sus resultados son visibles y palpables.

Contrastar y saber elegir, esa es la sabia elección.


13/6/14

La propia vida


Hace unos días hablaba con algunas personas sobre esa sensación que muchas veces tenemos de que el "tiempo vuela" en nuestras vidas. En cambio para otras parece que va muy despacio. Hay personas para quien la vida es una carga y personas para quien la vida es una fiesta. Y no siempre coincide con el nivel económico de la gente. Hay pobres que son muy felices y ricos que acaban quitándose la vida por no saber gestionar bien los problemas o las situaciones que viven.

La vida, cuanto más sentido tiene, más fácil es de llevar, más posibilidades de ser feliz tiene una persona y más disfruta de ella. Dar sentido a todas y cada una de las cosas que hacemos cada día nos ayuda a vivir mejor y más ilusionados.

Podemos rodearnos y atiborrarnos de cosas, de dinero o de mucha gente que si no cargamos el deposito de nuestra propia vida de poco nos servirá. Nos sentiremos pobres y solos en la vida. La vida no es tanto lo que recibimos de ella sino lo que somos capaces de aportar a ella. Ahí está la propia riqueza de cada uno y la propia felicidad, saber darle sentido a nuestra propia existencia.

12/6/14

El rechazo: ¿Una oportunidad?


¿Cuál es uno de nuestros peores miedos en la vida? El rechazo, el no que se nos puede dar por respuesta, la puerta que no se abre, la venta que no cuaja. Muchas veces el rechazo nos tumba y hace que la desilusión haga mella en nuestra vida. Curiosamente el fracaso puede ser el inicio de un gran camino, de una nueva experiencia, de un presunto éxito.

Hoy hablaba con un padre del colegio sobre una situación ocurrida hace unos días con unos niños. La profesora se quejaba de la actitud de los niños: cantaban, bailaban haciendo gestos no apropiados para su edad. Muchas veces situaciones como estas nos hacen pensar que rechazan nuestras enseñanzas, aquello que queremos vender o lo que intentamos comunicar.

El problema no radica muchas veces en la persona que recibe o es objeto de lo que vendemos o intentamos comunicar. Como profesor o maestro, ¿hago que lo que trato de enseñar sea asumible, interesante y bonito para mis alumnos? Aquello que trato de vender, ¿lo hago de acuerdo con las necesidades del posible comprador?

Cada rechazo nos invita a pensar en la manera en cómo nos comunicamos y en qué comunicamos a los demás. Hoy poy se gastan fortunas de dinero para intentar llegar al consumidor final. Somos personas con emociones, sentidos, sentimientos, necesidades y formas de ver la vida. 

El rechazo tiene una doble vertiente, la de no llegar a conectar con las demandas de las otras personas, y la libertad que tienen otros de no querer lo que nosotros intentamos ofrecer. La gran cuestión es saber conectar con las necesidades de los demás y la posibilidad de enlazar con lo que nosotros ofrecemos.

Del rechazo podemos aprender a ser libres a la hora de que nos digan que no y a saber comunicar y empatizar mejor las necesidades del otro con aquello que nosotros ofrecemos. Un trabajo que requiere pensar en nosotros mismos.


11/6/14

Liderazgo


Me ha gustado esta foto que me he encontrado a primera hora de la mañana en el WhatsUpp por parte de Alejandro Albuerne, afiliado y socio. Si hace unos días reflexionaba que desde la violencia y de la imposición lo único que se conseguía era la distancia la imagen del buen líder que encabeza esta pagina nos deja cuatro cosas bien claras:
  • Enseñar. Y la enseñanza no parte del yo se y tu no. Concretamente hoy mantenía una reunión con mi equipo y de esa reunión todos hemos aprendido y todos han aportado lo que llevaban dentro. El buen líder enseña, y la enseñanza consiste en sacar la riqueza que los demás llevan dentro. El que cree que todo lo sabe camina en su propia pobreza y no se enriquece de la riqueza colectiva del grupo o de la sociedad de la que formamos parte.
  • Orientar. La orientación es la capacidad de tener clara las metas, saber hacia donde se camina y mostrar los posibles caminos. Si bien es cierto que el líder va delante abriendo camino también lo es que hay que ser respetuoso con los diferentes caminos y formas de llegar a la meta. Orientar es indicar hacia donde y cómo se puede ir. A partir de ahí es responsabilidad de cada uno hacer lo conveniente, partir de lo que se sabe o simplemente seguir a quien sabe. Hay que estar abiertos a nuevos caminos aún sabiendo el riesgo de equivocarse. Lo nuevo es una cualidad humana, parte de nuestra creatividad y de dar nuevas respuestas los retos cotidianos que tenemos.
  • Capacitación. La mejor manera de ser líder es capacitando a otros para que lo sean. El mayor liderazgo es el que permite que otros crezcan más que uno mismo. Es sembrar y permitir ser y crecer a los demás. Es hacer todo lo posible para que los demás desarrollen las capacidades que tienen y que pueden ser bien distintas de las que uno tiene.
  • Apoyar. Parece que el apoyo puede ser un arma arrojadiza contra uno mismo. Podemos tener la impresión de que apoyando nos equivocamos a no creer en la otra persona, o pensar que apoyándola puede tomar ventaja sobre nosotros. Apoyar es hacer posible el sueño de los demás aún cuando puedan equivocarse o superarnos. Es creer en el otro y de que su triunfo es parte de nuestro apoyo y que la posible derrota sea parte de un nuevo aprendizaje.
Somos líderes en familia, en grupos, en trabajos a realizar. Abrimos el camino con nuestras actitudes y decisiones, pero sobre todo permitiendo y respetando que los demás crean o no en nosotros, nos sigan o dejen de seguirnos. Es confiar en lo que queremos y en lo que los demás quieren para sus vidas. Somos líderes más por lo que vivimos y hacemos que por nuestras palabras o por lo que pensamos.


10/6/14

Sí podemos


Hay un poder grandísimo en las palabras que dirigimos a los demás como en las que nos dirigimos a nosotros mismos. Las palabras tienen el poder de levantar y motivar a alguien, como la de desmotivar y hundir a otros. Pero curiosamente no nos damos cuenta que durante la mayor parte del día con quien más hablamos es con nosotros mismos. ¿Qué tipo de mensajes nos enviamos a nosotros mismos de manera consciente o inconsciente? ¿Cuántas veces nos decimos el "no puedo", "no soy capaz", "no valgo" y otras muchas más expresiones de este tipo?

Curiosamente nos las decimos tantas veces que nos las creemos y nuestra mente inconsciente se la toma en serio al punto de que le haremos caso y seguiremos las sendas que se han construido negativamente dentro de nosotros, así como muchas veces inculcamos esas ideas a otros.

Decía Einstein en una ocasión que un niño había conseguido algo porque nadie le había advertido que era imposible. Es nuestra mente libre la que es capaz de sobrepasar los limites. Es nuestra mente condicionada por nosotros mismos o por los demás la que se retrae y ni siquiera intenta conseguir lo que sí es capaz de hacer cuando se es libre.

Repasar nuestras frases cotidianas, escribirlas en un papel, analizarlas con detenimiento y convertirlas en positivo es una tarea que sería bueno realizar cada día. Hablamos a solas con nosotros mismos, una veces para pensar en alto y otras para desahogarnos. Tomar conciencia de lo que nos decimos puede ser el camino para emprender la senda positiva y constructiva.


9/6/14

El poder de nuestras actitudes


Tengo la experiencia de estar tratando con una persona joven el inicio de una actividad empresarial en su vida con la finalidad de financiarse por si misma los estudios que hace y algo más. Me llama la atención sobre ella la ilusión y el entusiasmo que le pone, las preguntas que me hace, las dudas que tiene, los miedos que experimenta y las frustraciones a las que tiene que hacer frente.

Reconozco que no se lo pongo fácil, pero también que intento motivarla haciéndole saber lo que ella vale y lo que valen las actitudes que ella tiene hacia su sueño y que por ello cualquier desafío que se presenta en su vida tiene que afrontarlo como una situación de aprendizaje y de superación personal. No es fácil, lo reconozco. Pero es nuestra mente y nuestra manera de pensar y de afrontar las dificultades las que hacen posible que un sueño se haga realidad.

Una realidad que en un momento dado de la vida se llega a realizar, como así lo experimenta otro afiliado mío, que semana tras semana lo veo con ilusión y deseando ardientemente el poder llegar a una serie de metas y objetivos que tiene en mente. Y entre esas metas el poder ayudar a otros, como pueden ser ancianos, niños, etc.

Es lo que alimentamos en nuestra mente lo que nos hace caminar hacia lo que conseguiremos. En cierto modo es parte de la Ley de la Atracción. No es que atraigamos lo bueno o lo malo. Lo que sucede que lo que ilumina nuestra mente, bueno o malo, hace que nos dirijamos hacia ello.

La frase de Meyer es importante: Imaginar, desear ardientemente, creer en uno y en lo que se quiere, emprender y no esperar con los brazos cruzados. Es la realidad y las actitudes que forman parte de éxito que esperamos. La carencia de estas actitudes son las que nos abocan a los resultados que no esperamos y ello tan solo por un motivo, por tenerlos en la mente en un primer plano.



6/6/14

Autoeducación


En la vida podemos recibir muchas lecciones, pero la mejor es la que aprendemos por nosotros mismos. Yo lo he experimentado en varias ocasiones, sobre todo cuando te dejan sólo o no queda más remedio que enfrentarte por ti mismo a la realidad. Me viene a la mente mi hija cuando dice que quiere hacer algo por ella misma. ¿Y por qué no?

Cuando vamos creciendo vamos perdiendo esa naturalidad y originalidad que tenemos de niños y vamos queriendo que nos lo hagan todo. Pero, desde mi punto de vista, es ahí cuando aprendemos de verdad. De hecho, dicen los estudios, que tan solo recordamos un porcentaje muy bajo de aquello que oímos. El porcentaje aumenta cuando se trata de lo que vemos y oímos. Y cuando vemos, oímos y lo hacemos por nosotros mismos se queda mucho más grabado en nuestra mente.

Pero la vida no es tan solo recordar. Es aprender. Y a prender lo hacemos desde lo que ya hay y también desde lo que nosotros hacemos que haya, es decir, desde aquello que aportamos a la vida y a los demás. Algo que es cosecha propia, algo que sale desde nuestro interior y que lleva nuestro sello personal y transferible.

Estas situaciones provocan por una parte una sensación de conocimiento, pero por otra y mucho más grande, una sensación y sentimiento de ser alguien y de conseguir las cosas por uno mismo. Es ese sentimiento en el que nos damos cuenta que no dependemos sólo de los demás, sino que también nos valemos por nosotros mismos aportando valor a la vida.

Autoeducación, todo un proceso en el que la formación y la educación tiene un valor mucho más grande.





3/6/14

15 segundos


Uno de los ejercicios que hemos hecho este fin de semana ha sido el de intentar convencer a alguien de lo que vendemos en tan sólo 15 segundos. Interesante. Ya los anuncios que vemos en la tele no van más allá de los 20 segundos. 15 segundos es tiempo suficiente para impactar y dejar una señal clara en el cerebro de las personas a las que nos dirigimos.

Pero los 15 segundos no es algo que tengamos que tener en cuenta tan solo en las ventas. Son muchos los mensajes que lanzamos al día en nuestras vidas para intentar vender muchas cosas, desde valores, hábitos, creencias y todo aquellos que forma parte de nuestro sistema de valores, además de aquello que queremos vender para poder tener nuestra vida económica equilibrada.

Y en esos 15 segundos tiene que ir la definición de quien soy yo y de lo que yo aporto a la vida, a las personas en concreto y a las necesidades que ellas puedan tener. 15 segundos que bien pueden caber en una tarjeta de visita, en un apretón de manos cuando nos presentan a otra persona.

¿Cómo resumiría yo mi vida, mi misión y mis valores en quince minutos? Y lo que sí está claro es que está en función no en tanto a quien yo soy, sino a lo que yo puedo aportar a la vida de los demás. Resuena en mi mente aquella frase de Moisés cuando hablaba en el Horeb y se sintió enviado por Dios a liberar al pueblo de Egipto. El mensaje fue claro: "Yo soy me ha enviado". Y me ha dicho: "He visto el dolor de mi pueblo, he escuchado sus clamores y he bajado a liberarlos". Un mensaje claro y sencillo.

¿Qué vendo y aporto yo a la vida misma? ¿Y a los demás? ¿Qué aporta lo que yo hago? Porque en la medida en que aporte a los demás la misma vida me aportará a mí.