28/9/12

Autenticidad

Cuando uno no vive como piensa
Acaba pensando como vivr.

Gabriel Marcelo


Hablaba yo hace unas semanas con mi hija sobre el comportamiento que muchas veces tenemos con las personas. Unas veces somos de una manera, otras de otra. Con unos reímos, con otros estamos serios. Hay con quienes nos abrimos y los hay con los que nos cerramos. Y la reflexión que le hacia venia dada oír una cita de Jesús en la que nos ponía el ejemplo de Diis Padre que dejaba brillar el sol sobre buenos y malos. En ello nos jugamos algo muy importante, la autenticidad.

Ser autentico es ser, nada más y nada menos, libre. Libre para mostrarme tal y comí soy no importando las circunstancias en las que me encuentro o frente a las personas  con las que ne encuentro. Esta autenticidad, o saber ser y estar, nos permitirá ser y mostrarnos a los demás tal y como somos sin ningún miedo a ser reconocidos o rechazados, a ser alabados o criticados.

Lo mejor de todo es que esta autenticidad permitirá que los demás participen de la riqueza que llevamos dentro y puedan incluso beneficiarse. Es un estado de libertad en el que me acepto como soy, me muestro como soy y soy consciente de que dentro de mi hay una riqueza que puedo aportar a la vida y a los demás.

Felicidad y paz son los beneficios. No huyo de mi mismo. Me muestro porque soy simplemente así y así me muestro al mundo. Simplemente a mi me tico ser yo. ¿Un problema? ¡Para nada! Soy feliz en mis torpezas y en mis habilidades. Es lo que aprendemos de los niños, el no vivir con todos los esquemas que vamos aprendiendo en la vida y que nos "impone" la sociedad.

Una manera de buscar esa autenticidad es el escribir en una hoja de papel, y cuando digo escribir es escribir en papel y con pluma, cinco momentos en los que me sentí plenamente feliz en la vida. Seguidamente descubrir cual era el papel que yo desarrollaba en esos momentos de felicidad y el tercer paso el descifrar los factores comunes en caldas esas situaciones. Ello me permitirá encontrarme conmigo mismo a través de mi propia vida.

Autenticidad, ser simplemente yo, cada momento de la vida como si nadie me viera aunque todo l mundo me viera.

27/9/12



Ayer estuve en una reunión de trabajo, una especie de recarga emocional y motivación al que celebramos cada tres meses y en la que participan personas que se van a incorporar a trabajar con nosotros.

Entre los ponentes estaba una mujer de casi 50 años que es una de las mejores, con una producción que raya la excelencia. Contó su historia. Dejó de dar clases de apoyo de matemáticas a adolescentes. Se dedicó a limpiar escaleras. ¡Menudo cambio! ¿No? Un día vio un cartel de que se buscaban agentes comerciales y, después de ver el mismo cartel durante tres semanas, decidió entregar su curriculum al mismo tiempo que decía a la persona que le entrevistaba; soy mayor, no tengo ni pienso tener carnet de conducir, soy extranjera y no conozco a nadie, nunca he vendido nada y lo único que a lo que puedo aspirar en estos momentos es a un telefono móvil. Pero quiero intentarlo.

Después de unos años está en el ranking en uno de los primeros puestos. Todo es cuestión de actitud y de saber manejar las herramientas que se tienen en la vida y la cercanía a la gente, decía ella. No tengo carnet de conducir pero sí capacidad para ir en el bus y hablar con la gente, escucharla y ofrecerle mis servicios, o bien caminar por la calle, sentarme en un banco y hacer otro tanto de lo mismo con los que allí estan sentados.

Hoy, mucha de esa gente, me llama y me piden que les venda una propiedad a ellos o a uno de sus familiares. Es el contacto con la gente, con su realidad y la actitud que uno tiene lo que hace posible suplir las carencias que uno tiene y utilizar al máximo las que herramientas y cualidades que se tienen.

Llego a casa y veo un reportaje sobre Kyle Maynard, una persona sin, prácticamente, manos ni pues que ha escalado el Kilimanjaro. ¿Qué acabas pensando? Que en la vida muchas veces tan solo tenemos excusas y que, en realidad, SI PODEMOS.

26/9/12

Anclajes para la alegria

Apoyarnos en los momentos difíciles es de vital importancia. En medio de la turbulencia buscamos algo que nos de seguridad. Entre los muchos recursos tenemos uno que es importante y que influyen de una manera clara en todas las culturas: la música.

Si echamos la vista atrás podremos darnos cuenta de que hay canciones que elevan nuestra inspiración y que hay otras que nos hunden en la melancolía total. Saber escoger aquellas que nos inducen a la acción, a la positividad, al desarrollo de nuestra energía y a nuestro propio crecimiento es tan importante como rodearse de gente positiva que nos ayuda a crecer.

¿Por qué no hacer una lista de canciones que me han inspirado y motivado? ¿Por qué no tenerla a mano para esos momentos de necesidad? Y, ¿por qué no? levantarse por la mañana con ellas o ir al trabajo escuchándolas?

Llenarse de espíritu positivo es importante, y muchas veces nos o,visamos de ello. Tener en nuestra dieta una lista de canciones nos mantendrá con energía positiva y con ganar de tener una sonrisa en los labios en todo momento.

Te dejo una lista de canciones que tal vez te alegren el día:

Think de Areta Franklin.
Muucho Mejor de Los Rodríguez.
Celebration de Kool & The Gang
Viva la vida de Coldplay
Love Me Do de los Beatles
Sabor de Amor de Danza Invisible.
Status of Swing de Dire Straits
Wonderful  World de Sam Cooke
Land of 1000 dances de Wilson Pickett
Misread de Kingston of Convenience
Sir Duke de Stevie Wonder
I can't Getafe no satisfactión de Rolling Stones
I can't Help Mysef de The Four Tops 

¿Tienes tu alguna que te inspire?

Puedes ponerla en comentarios. Nos ayudarás a todos. Gracias.

25/9/12

Recuperando la alegría

Si podemos recobrar la alegría. Si antes en nuestra vida SI hemos sido capaces, ahora también podemos hacerlo. Los recursos estan dentro de nosotros mismo y solo hace falta el poner nuestra actitud, que es lo fundamental:

Mirar al pasado y tomar consciencia de como lo hemos conseguido, acercarnos a todo aquello que nos hacia feliz, revivirlo y dar unos pocos pasos hacia lo que hacíamos o algo que nos pueda llenar nos ayudará a conseguirlo. Cualquier problema que tengamos o que alguien pueda sufrir puede ser un excelente inicio. El reto es solucionarlo.

¿Qué es lo que provoca la actitud de levantarse y de recuperar la ilusión por uno mismo o por algo? Un ¿PARA QUE? Si, el motivo, el sentido que le damos a la vida, a nuestra propia persona o alguien como puede ser el compañero de la vida, los hijos o alguien querido, siempre podrán ser un motivo que nos aliente.

Acercarse, aunque no apetezca, a un grupo de personas que nos puedan hacer sonreír, crecer, hablar, jugar o vete tu a saber qué. Cambiar de posición. ¿Tengo la cabeza baja? La subo. ¿En silencio? Empiezo a hablar solo, con otros o a rearme. Cambiar la actitud corporal y de hábitos diarios nos ayudará.

Apreciar cada paso que se da, mirar con alegría al siguiente que se va a dar y vivir de antemano la satisfacción que se va a tener. Anticipar los resultados, visualizarlos y vivirlos aumenta la actitud y motivación que pidamos tener.

Si antes lo he vivido y sentido, ¿qué lo impide ahoga? Todo es cuestión de querer y de dar cada día, al menos, un pequeño paso.


24/9/12

Controlando pensamientos

"Las personas que no son capaces de controlar sus pensamientos,
vivirán en sufrimiento."

Es una frase que acabo de escuchar en la radio. La verdad es que somos lo que pensamos, y los pensamientos nos juegan una mala pasada hasta el punto de perder una partida o un sueño antes de comenzarlo.

En el mundo vivimos dos clases de personas, los optimistas y los pesimistas; los que confían y los que se dejan llevar por el miedo. Al final, ¿Quienes son los que triunfan? Tu mismo puedes responder a la pregunta.

¿Cual es nuestra forma de pensar y nuestra actitud en la vida? Si somos de los que creemos y confiamos, de los que se sienten atrevidos y desafiamos a los miedos, de los que las dificultades son autenticas oportunidades para lograr algo, el éxito está servido. Por el contrario, si somos de los que nos dejamos llevar por los miedos, desconfiamos de nosotros mismos y de los que nos rodean y nos dejamos vencer por la dificultad, el fracaso también está servido desde el principio y muchas veces desde antes de iniciar el proceso ya que muchas veces estas actitudes y pensamientos nos condicionan para dar un primer paso.

El detonante de todo es la ilusión. A mayor ilusión, mayor empeño, actitud positiva y apertura a lo nuevo. Hay mil razones para no iniciar algo, pero siempre habrá una para ir tras el sueño. Y esa razón es suficiente.

Si controlamos nuestros pensamiento podremos hacer que estos nos empujen a realizar algo. Somos lo que hacemos, decía Aristóteles. Y hacemos lo que pensamos, aunque muchas veces no somos dueños de nuestros pensamientos y éstos se apoderan de nosotros y nos ponen a su merced. ¿Son nuestros pensamientos racionales o carecen más bien de toda lógica.


21/9/12

Las diferentes verdades



Muchas veces defendemos nuestras ideas a capa y espada. Nos vemos en la posesión de la verdad. ¿Qué pasaría si por un momento cambiráramos de personaje o de posición? ¿Qué ocurriría si por un momento nos pusiéramos ante una circunstancia concreta en el papel de niño, de anciano, de payaso y de bombero al mismo tiempo?

Jugar diferentes papeles ante un mismo problema, aunque parezca absurdo nos da perspectivas diferentes? Tenemos la mala costumbre de pensar siempre en la misma dirección. Pensando de la misma manera obtendremos siempre resultados parecidos.

Desde el punto de vista terapéutico se usan dinámicas de sentar a pacientes e iniciarlos en un dialogo consigo mismo haciendo que se sienten en sillas diferentes. En cada silla se les ofrece la posibilidad de presentar perspectivas diferentes ante su situación.

Ponernos en la piel de otros nos ayuda a explorar nuevas perspectivas y a no encerrarnos en las nuestras. Abrimos las puertas a la riqueza de vivir nuevas perspectivas, sensaciones y experiencias. Lo único que nos separa de ello es el miedo y la inseguridad propia. Tenemos que ser valientes para vivir y no tan solo si revivir.

20/9/12

Todos necesitamos de todos



Me enviaron este cuento:

El juez que además de resolver el caso , quiso dar una lección a un aprovechado .

Dos hombres se presentaron ante un juez de la localidad a fin de dirimir su caso .
 _ Señoría _ dijo el primero _. vengo a demandar a este individuo porque ha vendido toda la leña que ha cortado y no quiere darme mi parte.

_ Si ha sido él quien ha cortado la leña, ¿ qué es lo que has hecho tú ? _ preguntó el juez .

 _ Yo lo he estimulado dándole gritos de aliento y ánimo constantemente . Eso ha permitido que cortara más leña de la habitual y que le pagaran una cantidad superior a la que normalmente recibe .

 El magistrado se quedó pensando unos instantes y ordenó :

_ Lo que reclama este hombre es justo . Leñador , dame la bolsa que has recibido y entregaremos a este hombre lo que le corresponde .

El leñador se quedó compungido ante lo que consideraba una injusticia , sin embargo el otro sonreía satisfecho . El juez cogió la bolsa del leñador y la movió ante la cara del hombre haciendo que sonaran las monedas diciendo .

Este es tu pago : ya tienes el sonido del dinero .

MORALEJA
A todos los que tienen fácil verborrea 
para animar y aconsejar
que arrimen el hombro a trabajar si quieren ganar .

Al final me he quedado pensando:

Todo el mundo tiene derecho a cobrar de acuerdo a su trabajo. Entra dentro de lo más lógico y natural. Por una parte uno trabaja cortando leña y el otro, ¿trabaja animando? ¿Por qué no se considera ese un trabajo si gracias al que anima aumenta la producción? ¿Qué pasaría si en nuestra vida careciéramos de animadores? La verdad es que al producir más leña de lo habitual algo, aunque fuera de forma generosa, podría recibir, digo yo.

Hay otra cosa que me ha hecho pensar, ¿trabajamos por los resultados a obtener o por la realización que sentimos en todo el proceso? Muchas veces nuestra vida carece de sentido cuando miramos unica y exclusivamente al objetivo y nos olvidamos del proceso que nos ayuda a crecer y a incorporar nuevas cualidades y valores a nuestra vida. Si el proceso dura 10 años, ¿Dejaremos de vivir con alegría y sentido de auto realización todo el proceso? El éxito se saborea cuando se aprecia y valora todo el proceso.

El agradecimiento y reconocimiento son valores a la baja hoy en día, pero esenciales desde que abrimos los ojos a la vida. Todos necesitamos del cariño, del apoyo, de que en el algunos momentos se nos apoye, ilusione y motive. Lo hacemos y lo hacen, por lo general, sin buscar la recompensa, pero ello no quiere decir que debamos obviarla. Si cada uno está en su derecho de recibir el premio al exito también se tiene la obligación, en cierto modo, de compartirlo con aquellos que nos han ayudado a conseguirlo. Ahi está el trabajo de padres, amigos, educadores y mucha otra gente anónima que nos ha apoyado.

Tal vez no sea de recibo el reclamar algo que se nos pueda deber moralmente por algo que hemos hecho de forma altruista y voluntaria. Son muchos los padres que a lo mejor no se ven recompensados y agradecidos por sus hijos. Somos parte de una familia, de un pueblo de un grupo de personas que necesita del aplauso y del apoyo de otros, así como formamos parte de una sociedad que tiene que ser generosa con aquellos que dan tiempo y energías a otros para que "produzcan más leña".

Todos necesitamos de todos, sobre todo cuando se nos ayuda y ayudamos a crecer en cualquier aspecto de la vida.


19/9/12

Aferrandonos al dolor



¿Cuanto tiempo serias capaz de mantener 10 libros sobre cada palma de la mano y los brazos en cruz? Tal vez no mucho. El el momento en que nos llega el cansancio o el dolor los dejamos caer o los depositamos sobre cualquier sitio.

¿Qué hacemos con las experiencias y las emociones que nos han dañado? Generalmente las mantenemos durante mucho tiempo a pesar del dolor que nos produce. Si tomamos una sartén ardiendo con la mano nada más tocarla y sentir el calor la dejamos caer. ¿Por qué no hacer lo mismo con el dalo que se produce en nuestras vidas cuando experimentamos algo negativo?

Como dice Buda el dolor es consecuencia de algo que nos hiere en un momento determinado, el daño es el dolor que mantenemos por aferrarnos a ese dolor.

El daño es una dependencia que tenemos hacia personas o situaciones de la vida. No somos autónomos, no somos capaces de cortar. Nos mantenemos unidos a lo que no nis permite ser, lo hacemos de una firma física, mental o emocional.

¿Conoces la historia de los dos monjes que iban de camino y se encontraron con una mujer que quería cruzar el rio? El maestro la tomó en sus brazos y la ayudó a cruzar. Después de varias horas de camino el discípulo seguía atormentado en su mente por la actitud del maestro que le dijo: yo he dejado a la mujer hace unas horas, tu sigues con ella en la cabeza.

Nuestras ideas, sentimientos y valores a veces pueden ser nuestros peores enemigos cuando nos aferramos a ellos y nos hacen perder toda la libertad. La vida y la felicidad la experimentamos cuando somos libres, no cuando nos aferramos a las personas, valores o situaciones y nos hacemos prisioneros de ellas, regalándoles nuestra vida, felicidad ykibertad.

18/9/12

Abiertos a la comunicación



¿Por qué la comunicación es una de las cosas más difíciles que tenemos los humanos? Estamos llamados a entendernos en medio de un gran sinfín de trabas que nos encontramos a la hora de comunicarnos. Basta con ver muchos debates televisivos para comprender lo difícil que es comunicarse y estar abiertos a lo que el otro dice.

Lo primer que se me antoja decir es que tenemos que preguntarnos para qué comunicarnos.

Hay quien se comunica para imponer sus ideas; los hay que quieren compartir. Otros en cambio quieren aprender de su interlocutor. Lo importante de la comunicación es un equilibrio en el que comunicar es aprender y compartir con las otras personas.

Fíjate que en los debates televisivos una de las carencias que podemos encontrar es el silencio que permita escuchar y apreciar lo que el otro dice. Lo digo porque a veces no se permite ni hablar, se está a la espera de lo que el otro dice para, rápidamente y sin dejarle acabar, rebatir su pinto de vista. Creo que en este tipo de diálogos difícilmente se aprende y se valora lo que el interlocutor dice.

Yo me apunto a la escucha activa, esa escucha llena de preguntas que tan solo quiere profundizar, aclarar y aprender más de lo que el otro dice. Este método socrático nos ayuda a clarificar lo que el otro entiende así como ayudarle a clarificar las contradicciones que pueda llegar a tener. No se parte de la verdad de uno sino de la verdad el otro para, posiblemente, llegar a la verdad del otro o a la verdad de ambos.

Uno puede sentirse atacado y, al mismo tiempo, con la necesidad de defenderse. Quizás sea un camino inútil en el que fácilmente se llegue a un dialogo de sordos. Más vale aclarar y profundizar en la verdad del otro para que todas las luces y sombras, coherencias y contradicciones, lleguen a la luz. Y será la propia luz que uno encuentre, y no la impuesta por el otro. 

Dialogar no es querer ganar un debate o imponer unas ideas sobre las otras. Es gozar de la sabiduría y de la riqueza que se haya en todos nosotros, de una riqueza que posiblemente comparta o no, pero que al fin y al cabo es la misma riqueza de la vida.


17/9/12

Palabra y actitud receptora



Cuatro cosas hay que nunca vuelven:
una bala disparada
una palabra expresada
un tiempo pasado
y una ocasión desaprovechada

Proverbio Árabe


No se si te has fijado en na fuerza que tiene la palabra que emitimos a diario; tiene la fuerza de dar vida, así como la fuerza de destrozar a una persona. Junto con el poder de la palabra hay otra fuerza que está en juego, la actitud receptora de la misma.

Si miramos hacia nosotros mismos, hacia nuestra propia experiencia podremos encontrar a lo largo de nuestra vida experiencias de palabras que han llegado a nosotros y no nos han dicho nada de especial, palabras que nos han tocado de lleno y nos han empujado a darnos cuenta de la vida y vivirla plenamente y palabras que nos han herido y nos han llegado a destrozar por completo. Esa es la fuerza incontestable que puede tener la palabra en sí.

Ya en el Nuevo Testamento el Centurión le dice a Jesús que "tan solo una palabra suya bastará para sanar su hijo". La palabra de un padre suele ser Palabra de Dios para un hijo que tiene depositada toda su confianza en su padre. La palabra de un médico dicen que es el 50% de la curación de un enfermo. La palabra de un amigo es la que buscamos con mayor prontitud en momentos especiales. Es el poder de la palabra.

Pero también hay momentos en los que la palabra no suena o no provoca nada en nosotros. Hay palabras que pueden sonar a chiste, otras a ligereza, las hay que suenan a falta de conocimiento. Existen las palabras que llevan intencionalidad y no compartimos. Las hay que intentan provocarnos o incluso confundirnos. Hay palabras de todo tipo.

¿Donde radica la diferencia? En la actitud, en la confianza que depositamos hacia esas palabras, en la autoridad moral de quien las emite, del sentido que pueden aportar a nuestra vida, de la necesidad que podemos tener de ellas y, en definitiva, del poder que queramos otorgarles, un poder que está siempre dentro de nosotros, al punto que las mismas palabras pueden hundirnos en un momento dado, dejarnos indiferentes en otro y llenarnos de energía en  otras ocasiones. 

La palabra tiene fuerza, pero depende de la que nosotros queramos darle. Todo depende de nuestro estado de apertura y de la seguridad que tengamos en nosotros mismos y en los demás.






14/9/12

Pasado, presente y futuro





Escuchaba ayer en la radio que has que ser agradecidos con el pasado, expectantes con el futuro y sobre todo vivir con pasión el presente. Lo que más destacaba en ese momento para mi fue lo de ser agradecidos con el pasado. El hecho de agradecer el pasado lleva consigo algo importante:
  • Buscar el lado positivo de todo lo que nos ha pasado, incluso situaciones que pueden haber sido negativas en un momento dado. Todos hemos experimentado situaciones desagradables, pero con ellas han venido momentos de crecimiento y desarrollo que no hubieran venido si las situaciones desagradables no se hubieran dado. La vida como tal, y en la naturaleza misma lo podemos observar, es pura tensión, reajustes y adaptación a las circunstancias. Ser agradecido con el pasado es una manera de estar abiertos a aprender de la vida.
  • El futuro es importante. El futuro le da sentido a la vida. Siempre tenemos una causa, un objetivo que nos motiva, nos alienta y nos ayuda a desarrollar nuestra vida un poco más, a sentirnos satisfechos de nosotros mismos y del desarrollo que vamos haciendo de nosotros mismos como personas. Pero el futuro no debe ser lo único y más importante que tengamos, puesto que toda vía no existe.
  • Es el presente, el que hay que vivir con pasión porque como alguien ha dicho el presente es el futuro que se va construyendo a cada momento. Es el presente lo que gozamos de forma real. Es el presente lo que vivimos y lo que nos hace sentir que estamos vivos. Es el presente el que hace que vayamos subiendo un y otro escalón hacia el futuro de forma real y lo que nos anima a construir constantemente.
El pasado es el trampolín de la vida, es la experiencia en la que nos apoyamos para dar saltos hacia el futuro construyéndolo con cada paso que damos en el presente.


13/9/12

Mentiras y Confianzas



¿Cómo reaccionamos cuando alguien nos miente? La verdad nos llevamos una desilusión. La imagen de la otra persona puede llegar a bajar en picado y nuestra confianza ante ella puede verse reducida en una gran cantidad, al punto que muchas veces cuesta recuperarla. En nuestra retina siempre estará la imagen de la otra persona pero, ¿podemos hacer algo más?

Es cierto que por una parte está la persona que nos engaña. El hecho de que nos diga algo que no es verdad, que nos oculte algo que nos pueda herir, que evite una posible confrontación con nosotros es algo que puede tener que ver con la autoestima de la persona en cuestión. A mayor número de mentiras es más bajo el nivel de autoestima que la persona puede tener. La mentira busca que el agrado y la aceptación permanezcan a pesar de enmascarar la verdad de una manera u otra.

Pero hay otra realidad en la que no solemos pensar y que muchas veces hace posible que la mentira se de y que, ciertamente, no excusa en modo alguno al que miente. Me refiero a la capacidad de dar confianza a los demás para que se abran totalmente a nosotros con toda claridad. La intolerancia que muchas veces mostramos a todo aquello que no nos agrada, que no coincide con nuestras ideas y que no se alinea con nuestros valores hace que cerremos la puerta a la confianza que otros puedan depositar en nosotros.

Las formas en cómo reaccionamos muchas veces pueden parecernos normales a nosotros, pero sabemos que es muy cierto que las personas somos muy susceptibles y que nos dejamos herir por las formas utilizadas por otros. La confianza se gana, no es gratuita. Uno no se abre a otro de la noche a la mañana. Es el resultado de una comunicación y de pequeños depósitos emocionales que se van haciendo día a día.

Es por ello que la confianza ganada no es cosa de una persona, sino de dos o más. Cuando la mentira salta a la vida real hay dos cosas y no solo una que tenemos que preguntarnos: El porqué de la mentira del otro, ya que siempre habrá una razón u otra, muchas veces tendrá que ver con su propiua autoestima, y la capacidad mía de dar esa confianza, ya que muchas veces podremos invitar a ella y otras, en cambio, invitaremos a todo lo contrario con nuestras actitudes.

La confianza y la mentira no siempre es cosa de uno, sino de todas las partes en las que uno interviene.


12/9/12

Entre la emoción y la razón.



Somos seres racionales pero, ¿usamos más la razón en nuestras decisiones o las emociones? ¿Nos movemos más en el terreno de las emociones o guiados por una pauta racional? Razones versus intuiciones; ideas contra sentimientos. ¿Donde está el camino y el equilibrio? 

Todos somos racionales, es lo que nos distingue de una u otra manera de los animales. Pero todos tenemos emociones. Lo más curioso de todo que si hay algo que provoca  en nosotros una ilusión buscamos todos las excusas posibles para justificar nuestras decisiones. Pero son reales esas justificaciones o simplemente las adaptamos a los sentimientos. ¿Nos engañan nuestras ideas ante lo que sentimos o son las ideas las que nos impulsan. Es el mismo dilema de siempre de quien es primero, si la gallina o el huevo.

Lo que si está claro es que las emociones pueden llegar a desequilibrarnos, mientras que el pesamiento tiende a ser más equilibrado y a ver todos los pros y todos los contras.Y lo más cierto es que ante un empate técnico a la hora de tomar decisiones lo que nos llevará a una u otra decisión es la emoción o feeling que puede provocar en nosotros.

Lo mejor es tener ambas en cuenta y no ser esclavos de una u otra. La objetividad y los valores que perseguimos son los que tienen que guiarnos.


11/9/12

¿Puedo cambiar mi forma de pensar?



Hay una canción de Roberto Carlos que me ha hecho pensar en innumerables ocasiones. Oímos consejos, observamos puntos de vista y modelos de vida diferentes y en medio del desconcierto seguimos actuando de la misma manera. A veces las consecuencias son terribles pues vivimos en un mundo de insatisfacción y vemos que no somos capaces de aportar nada. Vivimos instalados en la monotonía de "lo malo conocido, que lo bueno por conocer" y nos perdemos el asombroso deleite del viajar por la vida que ésta misma nos ofrece. ¿Es posible cambiar nuestra manera de pensar, de percibir la realidad o de interpretar los acontecimientos? Hace unos minutos una persona con un problema serio de salud me comentaba que no le quedaba otra cosa que aceptar su situación a lo que yo le añadía una pequeña postilla: piensa en lo que puedes hacer desde la situación en la que estás.

Aprovechando los Juegos Parlimpicos, le dije, piensa que toda la gente que allí está participando lo hacen partiendo de una situación que se han encontrado en la vida y desde esa situación se han preguntado lo que podían hacer. Unos llegan a competir, otros a ganar y otros simplemente a mejorar su situación. El común denominador es que parten desde lo que son, de lo que tienen y de lo que pueden hacer. ¿Cómo conseguirlo?

  • Cuestionando las ideas negativas que a veces nos vienen a la mente. No por quejarse resolvemos los problemas. Cuestionarnos nos lleva a preguntarnos, y la pregunta nos abre a nuevas respuestas.
  • Cuestionar nos lleva a cambiar de posición, a abrir nuevos caminos, a investigar nuevas posibilidades. Zaqueo no podía ver a Jesús porque era pequeño y la casa donde estaba Jesús estaba llena de gente. ¿Qué hizo? Subirse a un árbol para poder verlo, Es decir, cambió de perspectiva. Yo puedo cambiar mis hábitos. En vez de ir por el mismo sitio puedo ir por uno diferente. En lugar de sentarme en la misma silla todos los días, ¿por qué no cambiar? En vez de leer el mismo periódico o ver las noticias en el mismo canal, ¿por qué no cambiar? Los cambios, sobre todo de actitudes, producen otros cambios muchos más profundos y sin que nos demos cuenta.
  • Nuestra manera de pensar proviene de nuestra educación, de nuestro ambiente, de nuestra época, de nuestras relaciones, de la religión que profesamos, de los medios de comunicación por los que nos dejamos influenciar y por otras tantas fuentes. A veces nos aferramos a ideas y tendencias de forma inconsciente y sin cuestionarlas. ¿Qué pasaría si las cuestionáramos, si las cambiáramos? Muchos de los adelantos y servicios que tenemos hoy en día se han dado a raíz de haber sido cuestionados los precedentes.
Abrirse a lo nuevo y a lo diferentes, que no quiere decir que tengamos que aceptarlo y asumirlo a ojos cerrados, nos lleva a ampliar nuestras miras y sobre todo a sacar conclusiones propias que nos pueden ayudar a conseguir resultados diferentes como bien decía Einstein.



10/9/12



La violencia es 
el miedo a los ideales de los demás.

Gandhi.

Es una frase que siempre me ha llamado la atención. La agresividad y la violencia responden muchas veces al miedo que tenemos a que los demás triunfen sobre nuestras ideas o proyectos. ¿Has visto esa reacción que se tienen en los partidos de fútbol cuando un equipo va perdiendo? Pierden los papeles, abandonan su tipo de juego y los nervios hacen que se genere violencia y se impongan unos valores sobre otros.

¿Es esta actitud una de no saber perder? ¿Por qué no sabemos perder? ¿Se ve afectada nuestra autoestima por no ser elegidas nuestras ideas o valores? ¿Está mi vida en función de si se me elige o no para algo? ¿Es el poder lo que da sentido a mi vida? ¿Es el poder un símbolo que nos afianza en libertad o nos afianza por el miedo que imponemos a los demás?

Con el miedo y la violencia sujetamos a muchos, con la libertad tal vez nos quedemos solos. Con la violencia mantenemos a personas a nuestro lado, sin ella tal vez nos veamos solos. Miedo y violencia son una manera de enmascarar las inseguridades que muchas veces tenemos. La libertad nos pone a prueba con nosotros mismos, más que con los demás.


6/9/12

Ser proactivo: la responsabilidad conmigos mismo

.
Este hábito de efectividad representa la posibilidad de asumir nuevos desafíos en un ambiente de libertad individual y responsabilidad social de la persona humana. Este es el hábito de la conciencia y conducta de responsabilidad, el que resulta determinante en cada persona para comprender sus realizaciones y frustraciones, sus retos y sus respuestas, sus ambiciones y sus logros.
Es muy importante entender que entre los estímulos, procedentes del ambiente externo e interno, y las respuestas, manifestadas en conductas observables o no, existe la libertad interior de decidir. 

Algunos ejemplos ilustrativos:
Valorar positivamente la proactividad porque su práctica cotidiana le significará también mayor libertad personal.
Sentir, pensar y actuar reconociendo que la familia es la responsabilidad más importante.
Aceptar nuevos retos que desafíen a cuestionar y romper la precaria seguridad para desarrollarse cada vez más.
Supere con decisión y valor las barreras internas y externas que impiden actuar en forma proactiva.
Anticíparse al futuro diseñando con creatividad y oportunidad acciones preventivas.
Actúar con suma responsabilidad en el trabajo como un camino inteligente para progresar.
Reafirmar día a día la responsabilidad que tiene sobre su propia vida.


5/9/12

Los diez mandamientos de Steve Jobs

1. Haz lo que te apasiona.
2. Seguir tu intuición.
3. Investigar, observar y aprender.
4. Fichar a los mejores.
5. Arriesgar por tu idea.
6. Seducir a tus trabajadores y socios.
7. Mantener una plantilla reducida.
8. La calidad como religión.
9. Aprender del fracaso.
10. El momento es ahora.

4/9/12

Saber esperar



Acabo de leer unas declaraciones de Andrés Iniesta en las que dice: "Hay momentos en los que estás mal pero debes poner de tu parte para estar mejor. Momentos en los que las cosas no salen bien o no juegas tanto, ahi hay que estar tranquilo, pensar en el equipo y en que vendrán momentos mejores.

Son palabras en alusión a la crisis de un gran jugador de fútbol como puede ser Cristiano Ronaldo. Y es que momentos difíciles los tenemos todos. Hay ciertos aspectos que quiero resaltar:

Los momentos difíciles no son monopolio de una sola persona, sino un factor común de todos lis humanos, por lo que hay que saber vivirlos, sobre todo siguiendo las pautas de aquellos que han sabido vivir esos momentos.

La tranquilidad es la actitud a tener. No por estar mal o nervioso se resuelven mejor las dificultades. Una mente agobiada no tiene toda la libertad para pensar en la cantidad de recursos y salidas que tenemos a nuestro alcance.

Pensar en el equipo nos ayuda a ver que somos parte de algo o de alguien más. No somos el ombligo del mundo. Cuando a mi me resulte difícil dar todo lo que hay dentro de mi hay otros que oyesen hacerlo. Saber vivir en un segundo plano también es una posibilidad. La vida no siempre es protagonismo ni estar al 100%.

Vendrán tiempos mejores. Sacar provecho de la debilidad y de lis tiempos difíciles auguran tiempos mejores. A veces, cuando las cosas no salen como uno quiere, la vida nos da un tiempo para la reflexión, el reciclaje,el crecimiento personal y para mejorar.

3/9/12

Partiendo de los fallos.



No importa si has fallado o si quedaste golpeado.
Lo que importa es que aprendas algo, 
te levantes y vuelvas a intentarlo. 
Ganar es una buena sensación, 
pero ganar cuando nadie pensaba que podías lograrlo 
es una sensación increíble.




La verdad es que muchas veces la experiencia de fracaso. o mejor dicho, la fallida, nos hunde en la desilusión, la apatía y el desánimo. Todos lo hemos experimentado alguna vez. ¿Donde fijamos nuestra atención? Generalmente lo hacemos en e lado negativo. Nos quedamos con la parte que no sale, aquello que nos recuerda tan solo el fracaso. Hay otros elementos que no son tan visibles y por ello evitamos el seguir luchando y caminando hacia el éxito.ç



Decía Thomas Alba Edison que cualquier fallo o error en un experimento no es síntoma de fracaso, sino más bien una forma más de aprender cómo no se hace algo. Los reveses de la vida sirven, pues, no para desilusionarse sino para saber y aprender a conocer nuevos caminos para realizar las cosas.



Otra cosa es la búsqueda constante. No resolver algo a la primera pone en cuestión la motivación e importancia que le podemos dar a las cosas. Renunciar de forma fácill y ante la primera, segunda o x oportunidades cuestiona la importancia que le damos a nuestros objetivos.



Alguien decía en cierta ocasión, que las cosas las valoramos en la medida en que nos ha costado el conseguirlas. Si la hemos conseguido en un golpe del suerte tal vez no nos cueste dejarlas o verlas perder o marchar en nuestra vida. Si nos ha costado sudor y lágrimas el perder algo nos costará mucho más.



La capacidad de mantenerse en la lucha y en la entrega por algo que queremos conseguir es la mejor manera de abrirse paso en medio de las dificultades y de incentivarse en cada caso que las cosas no salen. La búsqueda en sí constituye una ilusión y un aliciente.