El emprendedor de verdad
conoce su competencia,
el mercado en el que se mueve
porque lo ha analizado todo antes con lupa.
Jose García.
La precipitación a veces nos lleva al fracaso. Decisiones tomadas en caliente pueden tener consecuencias desagradables hacia aquello que queremos conseguir. El éxito consiste es saber crear las circunstancias para que florezca en la vida en el momento oportuno. Puede que cualquier lugar o momento sea bueno para conseguirlo siempre y cuando creamos las circunstancias para que se de. Crear las circunstancias implica conocer el terreno donde se cultiva, el ambiente donde se trabaja, la competencia con la que uno se puede encontrar, o las dificultades y obstáculos que nos vamos a encontrar.
Muchas veces creemos en una idea, en un sentimiento, en un valor y nos lanzamos como si nada a vivirlo hasta que la realidad nos da un batacazo terrible y de repente nos damos cuenta que habíamos obviado ciertas dificultades u obstáculos que podíamos encontrarnos. La falta de previsión, el estudio de la realidad, la planificación seria del trayecto a recorrer hasta alcanzar nuestros objetivos con los posibles obstáculos a encontrar nos ha jugado una mala pasada.
La vida es un proyecto serio que tenemos que vivir, un proyecto que muy pocas veces nos ponemos a planificar y una vida en la que muchas veces carecemos de metas, objetivos e incluso proyecto mismo. El tener en cuenta la competencia, las dificultades no es para amedrentarnos o dejarnos veces por el miedo, sino más bien para ser conscientes de la realidad y adquirir la actitud y la aptitud necesaria para llevar a cabo los proyectos. Cuanto más conozcamos las dificultades, más nos acercamos a al objetivo, porque cada dificultad es un reto a conseguir, una dificultad a salvar y un escalón más que podemos subir hacia el camino hacia el éxito.
Es por lo que en esta sociedad de la información, que también es formación, muchos tienen miedo, como lo han tenido en otras épocas, a que muchos alcancen el conocimiento, a que se llegue al conocimiento de la verdad o de la realidad. La cultura es un poder impresionante, y cuanto más conocimiento tenemos de aquello a lo que nos enfrentamos, más fácil será vencerlo.
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