Después de 55 años juntos, se quedó sóla.
Tuvo la oportunidad de tener
a sus hijos y nietos a su alrededor.
Todos temiamos por su vida,
Eramos conscientes de que al poco tiempo
De la muerte de nuestro padre
Ella podía ir detrás.
88 años,
Unos hijos,
Unos nietos,
Una vida todavía por vivir
A pesar de un corazón que le falla.
Pero hay UN MOTIVO
Dentro de ella.
El suficiente para seguir adelante
Y confiando en si misma.
Eso es “MOTIVACIÓN”
La motivación es la gasolina, la energía que nos hace caminar de manera ineludible hacia la meta; es la fuerza que nos reviste a la hora de superar las dificultades que nos aparecerán en el camino y que nos invitarán en más de una ocasión a renunciar a los sueños y a los objetivos. Es el combustible que día tras día hará posible que vivamos el camino y el proceso de forma tal que nos sintamos tan metidos de lleno que los segundos, los minutos, la dias, las semanas, los meses y los años pasen como si nada. Es la misma sensación que experimenta el enamorado para quien todo se convierte en un instante que no pasa y no cuenta.
Y ¿donde nace esa motivación? Generalmente nace de la necesidad. Y puede ser una necesidad interna o externa.
La motivación interna es la más profunda y la que posible más efecto tenga. Es la que intenta dar una respuesta a una necesidad interna de seguridad, de realización personal, familiar o existencia. Es la respuesta a la necesidad que me hace sentir realizado como persona. Me hace sentir que valgo, que tengo un sitio en la vida, que hay algo dentro de mí que puede aportar algo a la vida. En definitiva, me hace sentirme útil y realizado. Tiene fuerza en si misma y no necesita del apoyo, del reconocimiento o de la aprobación de nadie.
La motivación externa es menos profunda. Puede desaparecer más fácilmente que la interna y nuchas veces puede depender de la aprobación de otras personas. La podemos encontrar cuando hay detrás de lo que queremos conseguir una remuneración económica, un ascenso o una simple aprobación. En éste tipo de motivación hay dos metas: la que queremos conseguir y la aprobación de quien nos la propone. El objetivo no nace directamente en nosotros, se nos propone desde fuera y nos parece muy apetecible.
Hay una motivación exterior que se ha dado en muchas personas y que tiene un sentido de transcendencia y que se refuerza de un sentido sobrenatural: la llamada de Dios que es capaz de hacernos sacar fuerzas de donde no las hay. Es una motivación que ha acompañado a canditdad de personas a vivir situaciones limites y salir realmente triunfnates de ellas.
La motivación está intimamente ligada, pues, a la necesidad personal que uno puede sentir o la necesidad de agradar o asunir retos o propuestas que pueden venir de situaciones o personas a nuestro alrededor, que no deja de ser personal y que deja entrever otro tipo de necesidades que podamos tener,
¿Me siento realmente motivado? Es la pregunta que me tengo que resolver antes de iniciar el viaje para saber si llevo el combustible suficiente para asumir el viaje, el coste, el trayecto y las consecuencias.
¿Qué me llama la atención de la meta que quiero conseguir?
¿Qué podré hacer gracias a ese cambio?
¿Qué necesidades satisfacerá la consecución de mi objetivo?
¿Qué aportará a mi vida?
¿Qué cambiará de mi vida?
¿En qué me va a beneficiar cara a mí y los míos?
¿Qué aspectos de mi vida se verán desarrollados?
¿Quién se beneficiará conmigo? ¿Cómo beneficiará a mis relaciones?
¿Qué estoy dispuesto a perder o cuanto estoy dispuesto a pagar?
Te dejo con ésta canción de Juan Pardo que nos habla de motivación:
http://www.youtube.com/watch?v=-ASp06kXfXM
Tuvo la oportunidad de tener
a sus hijos y nietos a su alrededor.
Todos temiamos por su vida,
Eramos conscientes de que al poco tiempo
De la muerte de nuestro padre
Ella podía ir detrás.
88 años,
Unos hijos,
Unos nietos,
Una vida todavía por vivir
A pesar de un corazón que le falla.
Pero hay UN MOTIVO
Dentro de ella.
El suficiente para seguir adelante
Y confiando en si misma.
Eso es “MOTIVACIÓN”
La motivación es la gasolina, la energía que nos hace caminar de manera ineludible hacia la meta; es la fuerza que nos reviste a la hora de superar las dificultades que nos aparecerán en el camino y que nos invitarán en más de una ocasión a renunciar a los sueños y a los objetivos. Es el combustible que día tras día hará posible que vivamos el camino y el proceso de forma tal que nos sintamos tan metidos de lleno que los segundos, los minutos, la dias, las semanas, los meses y los años pasen como si nada. Es la misma sensación que experimenta el enamorado para quien todo se convierte en un instante que no pasa y no cuenta.
Y ¿donde nace esa motivación? Generalmente nace de la necesidad. Y puede ser una necesidad interna o externa.
La motivación interna es la más profunda y la que posible más efecto tenga. Es la que intenta dar una respuesta a una necesidad interna de seguridad, de realización personal, familiar o existencia. Es la respuesta a la necesidad que me hace sentir realizado como persona. Me hace sentir que valgo, que tengo un sitio en la vida, que hay algo dentro de mí que puede aportar algo a la vida. En definitiva, me hace sentirme útil y realizado. Tiene fuerza en si misma y no necesita del apoyo, del reconocimiento o de la aprobación de nadie.
La motivación externa es menos profunda. Puede desaparecer más fácilmente que la interna y nuchas veces puede depender de la aprobación de otras personas. La podemos encontrar cuando hay detrás de lo que queremos conseguir una remuneración económica, un ascenso o una simple aprobación. En éste tipo de motivación hay dos metas: la que queremos conseguir y la aprobación de quien nos la propone. El objetivo no nace directamente en nosotros, se nos propone desde fuera y nos parece muy apetecible.
Hay una motivación exterior que se ha dado en muchas personas y que tiene un sentido de transcendencia y que se refuerza de un sentido sobrenatural: la llamada de Dios que es capaz de hacernos sacar fuerzas de donde no las hay. Es una motivación que ha acompañado a canditdad de personas a vivir situaciones limites y salir realmente triunfnates de ellas.
La motivación está intimamente ligada, pues, a la necesidad personal que uno puede sentir o la necesidad de agradar o asunir retos o propuestas que pueden venir de situaciones o personas a nuestro alrededor, que no deja de ser personal y que deja entrever otro tipo de necesidades que podamos tener,
¿Me siento realmente motivado? Es la pregunta que me tengo que resolver antes de iniciar el viaje para saber si llevo el combustible suficiente para asumir el viaje, el coste, el trayecto y las consecuencias.
¿Qué me llama la atención de la meta que quiero conseguir?
¿Qué podré hacer gracias a ese cambio?
¿Qué necesidades satisfacerá la consecución de mi objetivo?
¿Qué aportará a mi vida?
¿Qué cambiará de mi vida?
¿En qué me va a beneficiar cara a mí y los míos?
¿Qué aspectos de mi vida se verán desarrollados?
¿Quién se beneficiará conmigo? ¿Cómo beneficiará a mis relaciones?
¿Qué estoy dispuesto a perder o cuanto estoy dispuesto a pagar?
Te dejo con ésta canción de Juan Pardo que nos habla de motivación:
http://www.youtube.com/watch?v=-ASp06kXfXM
Y también con éste video de alguien que ha tenido que salir adelante con muchos menos medios que tú y yo:
http://www.youtube.com/watch?v=RoLoFe3Eze8
Y con éste otro video de alguien que ve en su hijo una motivación algo extraordinaria:
http://www.youtube.com/watch?v=zbXwlgjZ1oY
Y no dejes de mirar a tu alrededor. Hay cantidad de personas a tu lado cuya motivación, entrega y entusiasmo pueden ser una lección para todos.
2 comentarios:
Me encanto este artículo.
Estoy de acuerdo contigo en que efectivamente la motivación es esencial en nuestras vidas.
Y los objetivos tenerlos claros en nuestra vida nos ayuda a no perdernos con los sinsabores del día a día.
Hola Elva:
Gracias por tu aportación. Recuerda que en la vida nos movemos con brújulas. Los puntos cardinales, los GPS, etc.
Quien no sabe a hacia donde va, está perdido en la vida. Te animo a tener objetivos y ponerte en marcha.
Saludos
Fernando
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